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LA SONRISA DEL GIRASOL

LA SONRISA DEL GIRASOL

Me encanta que me mires con la sonrisa dibujada en el rostro. No tienes boca, pero aún así me sonríes. Sonríes cuando me miras, y mis ojos, a su vez, te devuelven una sonrisa agradecida.

 

Gracias, girasol, por contagiarme la sonrisa.

 

SonrienteSonrienteSonrienteSonrienteSonrienteSonrienteSonrienteSonrienteSonriente

 

Defender la alegría

Defender la alegría como una trinchera
defenderla del escándalo y la rutina
de la miseria y los miserables
de las ausencias transitorias
y las definitivas

defender la alegría como un principio
defenderla del pasmo y las pesadillas
de los neutrales y de los neutrones
de las dulces infamias
y los graves diagnósticos

defender la alegría como una bandera
defenderla del rayo y la melancolía
de los ingenuos y de los canallas
de la retórica y los paros cardiacos
de las endemias y las academias

defender la alegría como un destino
defenderla del fuego y de los bomberos
de los suicidas y los homicidas
de las vacaciones y del agobio
de la obligación de estar alegres

defender la alegría como una certeza
defenderla del óxido y la roña
de la famosa pátina del tiempo
del relente y del oportunismo
de los proxenetas de la risa

defender la alegría como un derecho
defenderla de dios y del invierno
de las mayúsculas y de la muerte
de los apellidos y las lástimas
del azar
y también de la alegría.

Mario Benedetti

11 comentarios

Igebelar -

Kaixo Hombre Deshabitado:

Ni que decir tiene que tus dos sonrisas me han emocionado muy profundamente. Ambas, aunque en apariencia tan diferentes, tienen mucho en común y creo, permíteme ahora diferir de algo que has comentado con respecto a la primera, que también tienen muchísimo valor. Son sinceras, espontanéas, tiernas, cargadas de buenos deseos e impregnadas de un halo de felicidad que surge de muy dentro (¿el amor?).

¡Qué maravilla que vayas a ser aita (papá) por segunda vez! Estoy convencida de que eres un aita maravilloso. Recuerdo muy bien algún comentario tuyo en el blog de Enrique en el que mencionabas a tu otra hija y tus sentimientos al mirarla. Siempre me ha llamado mucho la atención el lado más tierno de los padres, ese que a las madres se les presupone, y que en los padres parece una tímida flor que aparece en sus jardines con no demasiada frecuencia (los dichosos roles, je, je). Espero que todo salga de maravilla. Cuida mucho a tus otras dos chicas, seguro que las dos necesitan tu cariño de una forma muy especial en estos momentos.

¡Lo que daría por ver esa sonrisa cuando tengas a la txiki en las manos! Tiene que ser taaaaaaaaaaaaaaaaaan emocionante. Bueno, si te animas siempre puedes mandarme un documento gráfico del momento por e-mail, je, je.

Muxu goxo-goxoak.

PD: ¡¡¡Tu euskera es PERFECTO!!! Ah, otra cosa, no te preocupes por dejar comentarios en algún otro post que no sea el último. Siempre recibo en mi correo electrónico todos los comentarios que aparecen en el blog, así que aunque te diese por comentar algo del año pasado, por ejemplo, siempre me enteraría a traves del e-mail y podría contestarte, je,je. Todo bajo control.

El hombre deshabitado -

Quiero añadir un par de sonrisas más a tu colección (aunque es un poco tarde), la del adolescente enamorado que no se atreve a decirlo y es capaz, por ejemplo, de dar un gran rodeo a una calle para encontrarse con su amor secreto, fingir que es casualidad su encuentro y esbozar una sonrisa de felicidad al ver recompensado su esfuerzo. Una sonrisa que dice: "te encontré", que dice "como me gustaría decirte que te amo", "como me gustaría estar contigo para siempre". Es una sonrisa sin mucho valor (casi circunstancial aunque no falsa) que abre un mar de esperanza y es una oportunidad para decir simplemente... "hola"... si hay contestación por su parte él se sentirá feliz porque probablemente hablé 5 o 10 minutos con ella o incluso la acompañara un rato hablando de cosas de las que suelen hablar los adolescentes y en las que de seguro habrán muchas más sonrisas e incluso algunas risas.
Esos momentos habrán sido breves en el cómputo total de la vida de una persona pero esa sonrisa (sonrisa de la esperanza porque espera que algo llegue con ella) se le habrá quedado grabada en su interior y recurrirá a ese recuerdo a veces con alegría, otras con nostalgia, otras con tristeza o, quien sabe, quizá con dolor.


Mi otra sonrisa; la de un padre al que ponen en sus manos por primera vez a su hija recién nacida, observa su cara, su nariz, sus ojos, sus deditos, esa fragilidad con que vienen al mundo....

Probablemente esta noche nazca mi segunda hija, cuantas incertidumbres y a la vez cuanta alegría.

Muxu goxoak guztientzat.

¿Se dice así?

Igebelar -

Hola a todos:

Es una lástima que los problemas con el servidor de Blogia hayan hecho desaparecer la mitad de los comentarios de este post (jooooo).

Este nenúfar, no obstante, recuerda con cariño todas vuestras sonrisas, vuestros guiños y también ese paraíso de los niños que tan acertadamente describió el Hombre Deshabitado.

Gracias por compartir vuestras sonrisas conmigo.

Muxu goxoak guztientzat.

Igebelar -

Hola Toño:

"Muy bonita" tu respuesta (a la vez que breve), pero me consta que no has respondido a mi pregunta, je, je.

¡Qué escurridizo es "mi pirata"!

Muxuk.

PD: Espero no ser denunciada por plagio, ja, ja, ja.

Igebelar -

Kaixo Hombre Deshabitado:

Me alegro de que te sientas a gusto en mi estanque (a mí también me gustan mucho tus visitas, que conste). Jooooooooooooo, qué pena no haber visto esa sonrisa de la que hablas. Seguro que me iba a encantar (por si no se me nota demasiado, he de confesar que siento una especial debilidad por las sonrisas de todo tipo). De todos modos, me temo que en este caso tendré que conformarme con imaginarla una vez más, je, je.

Y, sí, tienes razón: una de las sonrisas que imaginaba era la de María del Mar. Estaba segura de que se iba a ilusionar con mi pequeña sorpresa. La sonrisa de un niño es SIEMPRE una sonrisa sincera y, por ello, es una de mis favoritas. La otra, de momento, no he tenido ocasión de verla, pero estoy casi segura de que también se produjo... (ejem, ejem)

Y ya que no os animáis a contestar a mi pregunta, la responderé yo misma. Otra de mis sonrisas favoritas es la "sonrisa enigmática", esa en la que se sonríe más con la mirada que con los labios. Buuufff, me e-n-c-a-n-t-a.

Por cierto, Monocamy se llama en realidad Toño, aunque yo suelo alternar sus nombres (Monocamy-Toño-Pirata...). Y en cuanto a mí... ¿es que no te gusta mi nombre? Es un nombre en euskera y significa "nenúfar". Precisamente por esta razón vivo en un estanque (virtual, eso sí). Y tú, querido Hombre Deshabitado, ¿tienes un nombre al otro lado de la pantalla?

Muxuk.

PD: ¿Puedo pedirte un pequeño favor? ¿Te importaría dejar una dirección de e-mail?

El hombre deshabitado -

Supongo que esa sonrisa imaginada es la de Mª del Mar, No se de quién ha sido la ocurrencia, si de Juan Luis o tuya (me inclino más por la segunda opción, los hombres somos demasiado dejados para esas cosas) pero os habeis ganado ya un lugar en el paraiso de los niños (ese lugar idílico donde la tristeza tiene prohibido el acceso y donde la felicidad se desliza por toboganes, salta de columpio en columpio y se sumerge en enormes piscinas de pelotas multicolores)
Es una lástima que no hayas podido ver mi sonrisa cuando he leido el blog de Enrique, era la de un adulto que se resiste a dejar de ser niño.

Por cierto, me encanta sentarme en el borde de tu estanque y observar en silencio los agudos dialogos entre tu y monocamy. Me hacen disfrutar mucho y no puedo reprimir una sonrisa ( ¡que a veces se convierte en carcajada!)

¿Por cierto como os llamais?

monocamy -

Muy bonito tu discurso. Pero me consta que "has captado" lo que quería decir jajajajaja.

Qué lista es mi niña, olé :D

GUAPA!!

Igebelar -

Querido Monocamy:

No me puedo creer que seas tan poco selectivo. ¡¡¡¿¿¿Tu sonrisa favorita es aquella que puedes ver???!!! No sé, no sé... hay algo que no encaja.

¿Acaso nunca has visto una de esas sonrisas que encierran, por ejemplo, un mar de falsedad? ¿También esas te gustan? Ay, ay, ay, si va a resultar que mi intuición me va a fallar contigo (¡jo, jo y jo!).

Las sonrisas "imaginadas", esas invisibles a los ojos, también pueden ser maravillosas. En esta última semana, por ejemplo, yo me he imaginado un par de sonrisas: una de ellas ya la he visto (hoy mismo, por cierto); en cuanto a la segunda... está todavía por ver (je, je).

Muxuk invisibles.

PD: Felicidades otra vez.

monocamy -

Sin duda LA QUE PUEDO VER.

Igebelar -

Hola pirata:

No vas muy desencaminado, no. Tormenta de sentimientos y color (me gusta, sí), o contradicción con patas (quiero decir, raíces), o nenúfar en el Estanque de las Dudas Flotantes, o ...

Por cierto, tengo una curiosidad: ¿cuál es tu sonrisa favorita? (la pregunta va también para cualquiera que quiera responderla, claro).

Besos con sabor a sonrisa.

monocamy -

Y, además, el girasol sonríe lo mire alguien o no, que como desprendimiento no está nada mal. Eso sí que es ser generoso :D

¡Todas las flores sonríen desprendidamente! O casi todas, porque nuestro Nenufarcito es una tormenta de sentimientos y color.

;)

Bechitoch.